Una idea simple de los bucles ordinarios. Estante oculto de bricolaje
Hoy quiero compartir con ustedes una idea casera simple pero útil que implementé en mi taller. Será útil para todos los que tengan un espacio limitado en el taller (garaje).
Con el tiempo, en mi escritorio, las máquinas ocuparon casi todo el espacio libre. Entre ellos se encuentra un molinillo (afilador), que en su mayoría está inactivo. Por lo tanto, me aseguré de que no se interpusiera en el camino, pero al mismo tiempo siempre estuviera a mano.
Para llevar a cabo mi plan, solo necesitaba dos bucles largos (puerta), que se pueden comprar en cualquier ferretería, un trozo de tablero (madera contrachapada) y algunos tornillos.
En primer lugar, hice las marcas en las bisagras.
Para hacer esto, coloque el lazo en la mesa y coloque un marcador con un marcador a una distancia igual al grosor de la mesa.
Luego apretó la soga en un tornillo de banco.
Y con un martillo lo dobló a lo largo de la línea marcada. Repetí la misma operación con el segundo bucle.
Al final, los bucles se veían así.
Luego los atornillé al tablero con tornillos. Además, fijé las bisagras cerca de la curva perforando agujeros en ellas.
Luego dio la vuelta al tablero, fijó las bisagras a la mesa y colocó la máquina encima.
Al final, corté un trozo de la cadena, lo aseguré debajo de la mesa y atornillé el tornillo autorroscante del extremo del tablero. El toque final fueron los dos ganchos que atornillé debajo de la mesa (el alambre se enrolla alrededor de ellos). El resultado es un producto casero muy conveniente, con el que puedes esconder y sacar rápidamente la máquina. Por lo tanto, la máquina está siempre a mano, pero al mismo tiempo no ocupa espacio en la mesa.