La belleza no requiere sacrificios, sino las inversiones adecuadas: lo que no debe ahorrar al elegir una lámpara para manicura.
Las niñas y las mujeres siempre quieren lucir bien arregladas, pero en el dinámico mundo actual, a veces queda tan poco tiempo para visitar un salón de manicura. He encontrado una solución para mí en el cuidado de las uñas en casa.
No fue difícil adquirir herramientas, barnices y pinceles. Pero la elección de una lámpara para manicura me desconcertó: en los foros, alguien recomendó tomar una más poderosa, otros apostaron exclusivamente por el tipo de lámpara y otros escribieron que todas eran dañinas. Tuve que recurrir a especialistas.
Tipos de lámparas para manicura.
Como regla general, hay 4 tipos de lámparas en tiendas especializadas:
La lámpara ultravioleta (UV) es económica y tiene sus inconvenientes: cada pocos meses es necesario cambiar las lámparas (la potencia disminuye, el tiempo de secado aumenta), no apto para todos recubrimientos.
Una lámpara de gas de cátodo frío (CCFL) es adecuada para todos los recubrimientos de gel, pero la ubicación de la lámpara (una espiral) no siempre seca todas las uñas al mismo tiempo.
· LED (LED). Hace frente a la tarea de forma segura y rápida, pero el costo es alto. El funcionamiento a largo plazo requerirá el reemplazo de los LED.
· La lámpara híbrida es una combinación de lámpara UV y LED o gas y LED. Sus precios son más bajos que los de los dispositivos LED y se secan a buen nivel.
Para uso doméstico, una potencia de hasta 40 W es suficiente, para uso profesional se recomienda 48-72W. En cuanto a los efectos nocivos, esto se aplica solo al primer tipo de lámparas y solo con un uso frecuente.
Ventajas de la lámpara SUN Q5
La lámpara de tipo híbrido SUN Q5 tiene suficiente potencia (36W) para secar esmaltes en gel en 30 segundos, tiene un tamaño pequeño (es conveniente llevarla contigo cuando voy a un amigo). Hay modos de tiempo para 10.30 y 60 segundos. Durante un año y medio no se encontró el uso de "contras".
¿Qué lámpara de manicura usas?