Solo supe a los 50 años que la cinta adhesiva pegada a un documento importante se puede quitar sin estropear el papel.
En el trabajo, suelo utilizar cinta adhesiva porque es indispensable en muchas situaciones en las que el empleador no puede permitirse el lujo de proporcionar artículos de papelería de moda. Por ejemplo, pegue etiquetas en carpetas, pegue en las esquinas de revistas y muchas otras cosas. Y cuántas veces ha sucedido que la cinta adhesiva sin torcer cayó accidentalmente sobre el documento, se atascó y... eso es todo, el documento está dañado.
Y solo recientemente vi una forma gracias a la cual la cinta adhesiva se puede quitar completamente de una hoja de papel sin dañar esta última.
Entonces, pego firmemente una cinta adhesiva en la hoja con el texto.
Y luego, tomando la cinta por los extremos opuestos, comienzo a estirarla con todas mis fuerzas.
La cinta se estira, elástica y se aleja tranquilamente del papel, sin adherirse a las fibras. Incluso yo, actuando con una mano, mientras fotografío con la otra, pude quitar la cinta adhesiva del papel casi sin dañarlo. Y si lo toma de manera responsable, entonces no puede causar ningún daño en absoluto.
¿Por qué me enteré de esto justo antes de jubilarme? Me apresuro a compartir con todos si todavía hay personas que no conocen tal secreto.
El segundo punto de interés es asegurar el final de la cinta. Lo que la gente simplemente no hace es doblarlo, pegar un trozo de papel, simplemente no se molestan, recogen la punta cada vez con la uña.
Mi esposo siempre pega una arandela a la cinta, es de metal, fina y se sujeta perfectamente, en cualquier momento lista para proporcionar el final de la cinta.
Y en el trabajo uso un clip de oficina, ya estoy acostumbrado, me conviene. Aunque también utilizo un disco, es práctico.
Pero en el caso de que necesite mucha cinta adhesiva y tenga que arrancarla constantemente, hay un secreto que usamos al empacar las cosas durante la mudanza.
Se colocó una abrazadera de plástico en un rollo de cinta, se apretó y se cortó la punta en un ángulo agudo. El resultado fue una aguja de plástico duro.
Cuando la cinta adhesiva estaba estirada, para arrancarla, solo había que engancharla al final de la abrazadera, la cinta se rompería y no era necesario cortar nada.
La punta permaneció en la abrazadera. Y la siguiente pieza es la misma.
Estos son los secretos de la cinta adhesiva que pueden ser útiles para muchos.